He entendido el "porqué" de tu partida; incluso, la he superado.
Me siento tan dueña de este cielo que al ponerme debajo de el, me elevo. Si, lo hago.
Me elevo y soy yo, soy el cielo.
Advierto con señas y bruscos movimientos que caeré, que estoy casi siendo nada como ayer, como mañana.
Recuerdo tu rostro, tu boca, tus ojos. Recuerdo tus manos, abrazos, tus besos y palabras, el viento de ahora me hace recordarte.
Y hoy, solo hoy te admiro. Te he sido fiel con mis argumentos y te he amado tanto que, por fin me desplome.
Ayer tu mirada que me quemaba los labios, y hoy tu recuerdo que se cae en pedazos.
Ayer y hoy. Sigo siendo quien fui, pero con mas o menos sentimientos, con mas o menos pensamientos, con mas o menos escritos.
Me he vuelto el cielo, invadida por tu presencia, me he caído en trizas y me he vuelto a levantar.
Hoy no se el significado de "FUTURO", hoy a cuestas solo me imagino mi por venir, hoy te dejo donde estás: en mi pasado, en mis recuerdos, en mis momentos y en mi pagina principal.
Mañana estaré yo, o estará alguien mas. Construyendo en las cenizas otro nuevo amanecer y borrando estas lagrimas con mis sonrisas, sin huella alguna del ayer.
Hoy, mañana y en un futuro, donde no se sabe: Qué, como y cuando volveré a estar bien.
